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Laboratorio de Tecnologías Apropiadas
ECOPROYECTO 2019 de 4to Año
Sistema de captación saludable

Natalia Fiumarelli, Juan José Oña , Emiliano Bello, Santiago Gandines, Guillermina Lima, María Josefina Lujan, Caetano Marigliani, Agustín Mier, Máximo Moreira, Camila Murugosa, Lucia Pace, Valentina Peratto, Santiago Priore, Ezequiel Suarez, Manuel Muñoz, Aldana Pino, Lucia Castro, Zoe Fernández, Agustín Goñi, Santiago Mateu, Sebastián Olivera, Paula Posada, Milagros Sabaj, Matthias Solimano,.


 

Resumen

Partiendo de cuestionarnos sí en nuestras casas el agua para beber la obteníamos de la canilla, embotellada o de alguna otra fuente, llegamos a desarrollar un Ecoproyecto que nos permitió conectarnos con diferentes regiones, innovar en el sistema de captación de agua de techo (SCAT) de nuestro laboratorio, además de comparar y ver la forma de cómo en otros lugares enfrentan esta problemática.

Palabras claves: agua, lluvia, captación, salud, filtro, techos, depósitos, separador, agua subterránea, pozo artesiano.

 

Introducción

En el Ecoproyecto del año 2017 vimos la forma de incorporar a nuestra dieta el consumo de brotes y germinados usando diversas técnicas, comprobando que son una manera económica y rápida de tener en casa alimentos sanos y frescos de forma muy sencilla.

En el año 2018 el Diagnostico Ambiental Participativo (DAP) nos llevó a investigar sí nuestros abuelos trabajaban la tierra, los espacios y tipos de cultivos que nuestras familias tienen en sus casas, extendiendo la investigación a la cooperativa.

Este año nos enfocamos en el agua y específicamente la que usamos para beber.

Primero investigamos a través del DAP de qué fuentes nos abastecemos las familias de la clase, comparándolo con la forma que lo hacían nuestros abuelos y cómo lo hacen en otras regiones.

Salimos a la Cooperativa para conocer en el territorio otras formas de obtener agua diferente a la que la mayoría de nosotros/as utilizamos.

En nuestro laboratorio tenemos captación de agua de lluvia que tratamos de usar para regar.

Del Ecoproyecto de 4to año del 2018 sabemos que en otras regiones la captación de agua de lluvia tiene un rol más importante que el que le damos actualmente en nuestra ciudad.

El Ecoproyecto de este año nos permitió participar de una red de conexiones con organizaciones de Rocha, Rivera y México.

El DAP nos llevó a identificar un problema y es que existe desconfianza respecto a la potabilidad del agua que sale de la canilla.

Nos propusimos como objetivo mejorar nuestro SCAT haciendo más eficiente el separador de primeras aguas para compartir el modelo con Villa Indart.


 

Método

Para el DAP registramos de dónde obteníamos el agua que usamos para beber en nuestras casas. Con esa información construimos una gráfica que nos permitió comparar y analizar lo que hacía la mayoría de las familias.

Identificamos que la mayoría consumía agua embotellada, algunos utilizaban filtros y muy pocos bebían agua directamente de la canilla.

Luego construimos una matriz con las respuestas de porque tomamos el agua de esa forma.

Estas técnicas nos permitieron identificar el problema que luego analizamos con el árbol de problemas.

Nos conectamos con la escuela de Villa Indart y la ONG mexicana Isla Urbana.

Analizamos videos de Isla Urbana para ver cómo construían sus sistemas de captación de agua de lluvia.

La Feria Ambiental nos permitió mostrar y compartir con las familias el modelo y lo que habíamos hecho hasta el momento.

 

Investigamos sobre el agua subterránea que existe bajo el suelo de la cooperativa, vimos cómo funcionaba la bomba instalada y lo comparamos con los pozos artesianos de Villa Indart.

 

Enviamos dibujos con esquemas de funcionamiento de SCAT a los amigos y amigas de la escuela de Villa Indart.

 

 

Resultados

Intercambiamos y comparamos la información con los alumnos de la escuela de Villa Indart.

Pudimos comparar los resultados de nuestra grafica con la de la escuela de Villa Indart.

Construimos un modelo a escala de separador de primeras aguas, aprendiendo de la experiencia de Isla Urbana con su Tlaloque.

Construimos y enviamos a Villa Indart un modelo de separador de primeras aguas que permite entender cómo funciona el sistema.

En el SCAT de nuestro laboratorio, con el apoyo de mantenimiento, logramos instalar un separador de primeras aguas que nos permite perfeccionar la ecotecnia que remueve tanto contaminantes disueltos como suspendidos.

Enviamos a Villa Indart las piezas para que ellos instalaran el aljibe de su escuela, un separador de primeras aguas que muy probablemente sus familias y vecinos puedan utilizar en el futuro.


 

Discusión

Los resultados obtenidos fueron muy buenos. Pudimos concretar un modelo que tenemos para probar en nuestro laboratorio y además mejorar la instalación del SCAT.

Vimos que era muy diferente las forma en la que la gente encaraba la problemática del agua y cómo nos compartamos respecto a ella en diferentes localidades de nuestro país y en el extranjero.

Pero lo más provechoso fue que hubo una cooperación que trascendió nuestra escuela. Desde México una organización aportó su experiencia, el equipo de mantenimiento nos ayudó a armar el separador y la cooperativa aportó los materiales que permitieron construir el separador de primeras aguas que se instaló en la escuela de Villa Indart.

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